Luego de finalizada la Primera Guerra Mundial, se dio origen al llamado Fascismo. En su nacimiento, se trató de un movimiento político y social cuyas principales orientaciones iban a favor del nacionalismo y las tendencias totalitarias.
Se originó en Italia y fue principalmente promovido por el conocido dictador Benito Mussolini. Se caracterizó desde su nacimiento, por su directa oposición otros sistemas políticos como la democracia y al liberalismo. Este medio político llego al poder en Italia por la fuerza, mediante un golpe de estado de Mussolini y entre sus más deplorables corrientes destaca, la creencia de que existe una raza superior de seres humanos.
Bases del fascismo
Se fundamenta en el antiguo proyecto conocido como “Corporativismo”. En él, se promueve que el estado o la nación, son los factores más importantes, estando por encima del sujeto o de las clases sociales. Elimina por completo cualquier tipo de detracción, por sí mismo se profesa como “El bien mayor”, en donde no existe otra forma de orden administrativos aparte del centralismo.
La mayor premisa de la que se valían, era el inculcar a todos los habitantes del pueblo un estigma de obediencia, logrando conformar de esta manera, algún tipo de unidad impenetrable. De hecho, una de las características del fascismo es clasificar a cada sujeto perteneciente a la sociedad, no por su disciplina o su carácter, sino por ser militante de algún grupo.
Otro punto que utilizaban a favor los profesantes del Fascismo era el ataque al estado anímico de cada individuo, dando uso sin ningún tipo de compasión a estrategias de represión, distintos tipos de violencia y absurdos discursos de propaganda. Fijando siempre algún enemigo y fomentando entre los pobladores, la frustración y el miedo.
Contraste con el socialismo y el capitalismo
Según sus propios fundadores, el Fascismo no se define como un modelo político de izquierda y mucho menos de derecha. Pero bien es capaz, en su fundamento, de combinar algunas características de distintos movimientos políticos y utilizarlas para su propio fin.
En la actualidad, los grandes conocedores de etimología dan por sentado que el Fascismo tiene serias tendencias a pertenecer a un grupo de derecha con carácter extremo. Dado que dentro de sus principales objetivos, este movimiento político promueve la defensa y el enriquecimiento de las economías fundamentadas, con poder y dinero.
Sin embargo, otra realidad política demuestra que el Fascismo deliberadamente ataca cualquier tipo de libertad económica individual, así como el comercio libre. Además de intentar tocar los sentimientos del pueblo y mediante la exaltación de los trabajos de las masas, desarrollar técnicas de atracción infalibles, lo cual, también los colocaría como una tendencia de Izquierda.
El fascismo en el mundo
El tipo de ideología fascista se extendió a lo largo y ancho del planeta, regando sus vertientes principalmente por toda Europa. Obtuvo influencia en muchos de los movimientos políticos dentro de países como Alemania, Inglaterra, Finlandia, Francia y España. Así como en otros países de la talla de Canadá, China, Hungría, Irlanda, México y de forma aminorada pero con igual existencia a lo largo de los Estados Unidos y América Latina.