La apariencia física es de gran importancia para un gran número de personas. Esto puede deberse a los estereotipos que vemos en las películas y televisión de la figura perfecta. Lo cual, ha llevado a tomar ciertas medidas alimenticias para perder peso y lucir mucho mejor.
Sin embargo, muchas de estas no son del todo saludables. Por esta razón, hablaremos todo sobre la dieta de no cenar para adelgazar.
¿Es culpa de la cena?
La razón principal por la cual subimos de peso es que no aprovechamos toda la energía de los alimentos. A tal efecto, estos son almacenados en forma de grasa en nuestro cuerpo aumentando nuestro peso y talla. De esta manera, el secreto no está en lo que comas sino como lo aproveches.
Por supuesto, es importante que la alimentación sea saludable para ver mejores beneficios.
La cena siempre ha sido objeto de cuestionamiento por los amantes del cuidado de la figura. Quienes afirman que al cenar antes de dormir todos esos alimentos son convertidos inmediatamente en grasa.
En efecto, esto no es del todo cierto, va a depender directamente de lo que comas y como lo comas. Todos los alimentos sobrantes están destinados a ser reservas de grasa a la hora que sea.
¿Es conveniente dejar de cenar?
Ante el razonamiento anterior es común que las personas supriman la cena para perder peso. Sin embargo, este es un mito que lo único que hace es afectar el funcionamiento de nuestro cuerpo. Ya que, a pesar de estar dormidos nuestra maquinaria corporal no se detiene, solo disminuye su actividad.
Por lo tanto, si es necesaria la energía de los alimentos para aprovecharla durante el sueño.
Es por esto, que no es conveniente suprimir por completo la cena, puesto que entramos en déficit calórico. Como consecuencia, nuestro cuerpo aprovecha las reservar energéticas y trabaja más.
Como el cuerpo humano es una maquina perfecta, esto producirá ansiedad y en consecuencia comer más en el desayuno. Por lo tanto, no es realmente una pérdida de peso sino un aumento del deseo de comer.
¿Cómo manejar correctamente la cena?
En lugar de dejar de comer por la noche, lo que debes hacer es controlar lo que comes.
Por ejemplo, evita comer comidas ricas en carbohidratos que puedan convertirse fácilmente en grasa. Lo que puedes hacer es comer una cena rica en vegetales verdes y proteína natural. Con esto, proporcionarás alimento al cuerpo para su funcionamiento sin que sea convertido en grasa.
La clave para manejar una buena cena es reducir las porciones y comer en un buen tiempo.
Cenar demasiado tarde tiene como efecto principal impedir un bueno sueño y transformar la comida en grasa. Puesto que el organismo realmente no la necesita ya que está próximo a entrar en reposo.
En conclusión, lo que sí es efectivo es reducir la porción de alimento nocturna y hacer la ingesta 2 horas antes de dormir.
Así, tu cuerpo habrá metabolizado la mayor parte del alimento y el restante funcionara como energía de reserva. La cual, es más que necesaria para mantener en funcionamiento el cuerpo mientras estamos inactivos. Omitir la cena solo aumenta tu deseo de comer y el cuerpo tendera a almacenar más grasas.