La primera vez que me hablaron de invertir en fondos cotizados, mi cara fue un poema. Tenía unos ahorros en el banco que apenas me daban rendimiento, así que me busqué un buen asesor financiero para que me aconsejase sobre un producto para invertir.
De los muchos que me enumeró los fondos cotizados llamaron mi atención, más que nada porque nunca había oído hablar de ellos.
Si como yo, tus conocimientos financieron no van más allá de la vuelta de la esquina presta atención a esta pequeña guía para saber qué son y como funcionan los fondos cotizados presta atención.
¿Qué son los fondos cotizados?
Cuando se habla de los fondos cotizados, a menudo se hace referencia a ellos como los ETF. Estas tres letras, son las siglas de Exchange-Traded Fund que se tradujeron al español como fondos cotizados.
Son como una especie de fondos espejo, su funcionamiento se basa en la repetición del comportamiento de un índice (IBEX35, DAX30…) Su objetivo es por lo menos igualar el valor de ese índice, algo que a largo plazo ofrece una mayor rentabilidad que los fondos de inversión tradicionales.
¿Cómo invertir en fondos cotizados?
Al igual que las acciones, los ETF se mueven en el mercado de valores, al igual que las acciones, de ahí el nombre de fondos cotizados. Por lo tanto no podemos acudir a un banco por ejemplo para que actúen como intermediarios, como si sucede con una fondo de inversión. Necesitaremos un bróker, a través del cual operaremos en el mercado en el cual cotizan los fondos que queremos contratar.
Dar con el mejor bróker, es por tanto el primer paso para asegurarnos un buen rendimiento a largo plazo.
La consecuencia de que en nuestra operación haya un intermediario, es que él también querrá su parte del pastel. Las comisiones que cobre, se llevarán parte de nuestra inversión.
Las participaciones solo pueden comprarse enteras, no se permite el comercio de fracciones; tiene toda su lógica ya que en un mercado de valores no tiene mucho sentido operar con facciones de un valor.
Mientras el mercado está abierto, puede operarse, por lo tanto no es necesario esperar al cierre de la bolsa para venderlos o comprarlos. Las transacciones con fondos cotizados, se realizan con otros partícipes, nos movemos por tanto en el mercado secundario. No estamos hablando de participaciones que se emitan directamente por la gestora del fondo.
De esta forma la participaciones se van pasando de unas manos a otras, en definitiva, la esencia del mercado secundario.
Hay que tener en cuenta a la hora de realizar este tipo de inversión, que a día de hoy no proporcionan ventaja fiscal alguna. Estas ventajas si podemos tenerlas, sin embargo con los fondos indexados que es un producto muy recomendado para aquellos que quieren un crecimiento a largo plazo de su dinero.
Si necesitas que tu dinero crezca es el momento de comenzar a buscar esos productos que mejor se adapten a tus exigencias financieras y personales. Infórmate y apuesta por valores que te den la mayor seguridad posible.