Dulces o saladas las crepes son siempre una opción excelente. Te damos una receta rápida y sencilla que nunca falla. Toma nota y manos a la obra.
Hacer unos crepes riquísimos está al alcance de todos, si, también está al alcance de los más negados para las artes culinarias. Toma nota de lo que tienes que tener a mano para una docena de crepes aproximadamente.
Dos huevos, dos cucharadas de azúcar, una pizca de sal, una cucharada de mantequilla que has de derretir, harina tamizada y leche. De manera opcional puede ponerse rayadura de limón.
Lo primero es batir los huevos, le añades el azúcar, la sal, la mantequilla derretida ya la harina hasta obtener una masa espesa. Cuanta más harina añadas, más leche tendrás que poner después y más mezcla te saldrá.
Crepés
Con la leche pasa otro tanto de lo mismo, cuanto más añadas más mezclas tendrás y más fina te quedará la masa.
Por otro lado pon la sartén a calentar, es imprescindible que no se te pegue la masa con lo que la sartén tiene que estar en buen estado y que la untes con mantequilla o aceite de oliva.
Vierte una cantidad de masa en la sartén de manera que quede cubierta la base de la sartén, te recomiendo que el fuego no esté muy alto. Poco a poco se irá solidificando hasta que consigas darle la vuelta.
Si prefieres hacer crépes saladas, debes sustituir el azúcar por la especias que prefieras, orégano, tomillo o romero son una opción fantástica.
Manos a la obra, no hay quien se resista a una crepe rellena.