Faltan pocos días para la llegada de las fiestas navideñas y muchos países se debaten aun sobre las medidas a tomar para evitar el previsible aumento de contagios Covid que se producirán en estas fechas.
En España, las medidas están reguladas desde hace varias semanas, pero no se descarta que alguna comunidad autónoma imponga más restricciones a la movilidad o las reuniones familiares en función de la evolución de la pandemia.
En cualquier caso, que estamos viviendo ya un espíritu navideño es un hecho. Las ciudades aparecen ya iluminadas con las clásicas luces decorativas, y en los espacios domésticos, quien no lo ha hecho, todavía está a tiempo de ello, y más si sigue estos consejos para sacar el máximo partido posible pensando siempre en conseguir un ambiente agradable y seguro y potenciar el ahorro energético.
Optar por luces de Navidad que sean seguras y estén certificadas
Hoy en día las luces de navidad y exteriores se pueden adquirir en todo tipo de establecimientos, pero la clave para ganar en seguridad es acudir a opciones que estén certificadas, que cumplan con la normativa europea y que sean seguras en su uso, de modo que no vayan a provocar ningún accidente doméstico.
A su vez, antes de colocarlas hay que revisar que funcionan de manera correcta, que no existen falsos contactos y que los cables están completamente desenredados.
Tras este paso, hay que colocarlas sobre una superficie y conectarlas durante 10 ó 15minutos. Si funcionan bien sin echar humo o derretirse, se puede instalar de manera segura. Este paso es especialmente importante con las luces de exterior, que están más expuestas a la intemperie: lluvias, viento e incluso tormentas eléctricas.
Colocarlas en lugares seguros
Las fuentes de calor y el fuego: la cocina, la chimenea, la caldera… no son espacios seguros para las luces de Navidad. Además, el cable ha de estar suelto, sin que genere tensión, y si es necesario incluir más cable, la mejor solución es usar un alargador.
Por otra parte, no deben conectarse más de tres extensiones de luces eléctricas de tamaño estándar a un solo cable. Este elemento no ha de quedar bajo la alfombra, el tapete, los muebles y sofás o el suministro de agua, pues son lugares peligrosos.
En las luces para exterior, que funcionan con pilas o batería en lugar de ir conectado a la corriente, es aconsejable acudir a luminarias que incluyan un cajetín protector seguro para las pilas, para que no se mojen y puedan provocar algún accidente.
Uso eficiente de las luces
Si en casa conviven mascotas, hay que enseñarles que las luces no son un elemento de juego, para que no pelen los cables ni las fundan con algún golpe. En caso de que se enciendan las luces y salten los plomos, lo mejor es deshacerse de ellas y adquirir unas nuevas.
Un consejo de eficiencia y ahorro eléctrico es acudir a luces tipo LED. Hoy en día, la mayoría de las que vemos en el mercado son de esta naturaleza. Cuando vayamos a la cama, hay que desconectarlas, o incluso podemos acudir a modelos que incluyen temporizador, y se encienden solo la franja horaria programada.
Finalmente, cuando pase la temporada navideña y haya que almacenar las luces, deberemos hacerlo con sumo cuidado, intentando no enredar mucho los cables, para que su uso en la Navidad siguiente sea más cómodo.
Luces para el interior y para el exterior
Las clásicas luces de interior son las de tipo guirnalda que se colocan sobre el árbol de Navidad, pero el mercado ofrece cada vez más variedad, de modo que podemos instalar estas mismas guirnaldas con luces doradas en pasamanos y barandas, agregar tiras led en algunos muebles o incluso instalar juegos de luces en los bordes del televisor.
La amplia variabilidad, tanto en diseño como en tonalidades, nos permite crear efectos y diseños para todos los gustos. Esto lo vemos especialmente en el exterior, donde podemos colocar conos led en forma de árbol de Navidad, figuras clásicas retroiluminadas (Santa Claus, duendes, elfos, estrellas, muérdagos, bolas de luz), y un sinfín de opciones.En cuanto a las tonalidades, lo habitual es acudir al blanco cálido, que es muy recomendable, pero también a otras opciones de carácter más neutro, como el blanco frío, o bien los tonos RGB para jugar más con los efectos y la diversión.