El fanatismo es definido como la necesidad que tiene la persona de aferrarse a una ideología y hacerla su razón de sustento. Las personas son por naturaleza dependientes de tener una razón por la cual seguir adelante o luchar. Por suerte la mayoría del tiempo esto es algo positivo porque impulsa a las personas a centrarse y cumplir sus objetivos.
Cuando esto no funciona como debería hace que la persona se obsesione con ideologías que cree suyas, que lo identifican y lo hacen ser quien es. Las personas tienden a volverse extremistas con dicho tema, pueden llegar a ser violentos con la finalidad de imponer aquello en lo que están seguros que es así.
Las personas con fanatismo no escuchan a las otras personas, creen siempre tener la razón, cuando una persona no piensa igual tienden a desecharlo y sólo estar con personas que si lo hagan.
¿Qué significa vivir en fanatismo?
Entrar en el fanatismo te limita mucho, porque como personas necesitamos la diversidad de relaciones con otras personas, no se debe discriminar por pensar diferente porque la persona que menos esperas puede proporcionarte grandes cosas, ayudarte a crecer como personas y le cierras las puertas por cosas que en el fondo no son realmente importantes.
Evidentemente las personas tienen la capacidad de tener diversidad de pensamiento, de tener una opinión propia, consecuente y sólida con respecto a cualquier tema, pero el tiempo ha hecho que las personas sean más tolerantes y respeten mucho más al prójimo que no comparte los ideales.
Lamentablemente en la actualidad a pesar de los muchos avances que se han hecho para infundir el respeto por los otros, el fanatismo sigue teniendo poder pues se ha esparcido en muchos aspectos de nuestra vida como lo es la religión o la política.
El fanatismo político como uno de los peores que existen
Cuando una persona se aferra a un ideal político se hace daño tanto mental como espiritualmente. Lamentablemente este fanatismo ha hecho que millones de personas mueran injustamente alrededor del mundo.
Las personas suelen dejarse llevar por otras personas con capacidad de liderazgo que los hacen creer diferentes cosas, y no es sólo eso, el impacto que tiene la publicidad de la misma política hace que la persona pierda la noción de lo correcto o lo incorrecto y comience a sólo creer en lo que ese líder o ese movimiento político diga.
Es grave ver la cantidad de gente que cae en este desagradable desequilibrio, nadie en la tierra puede creer que tiene la absoluta verdad o la absoluta razón en algo, porque no es así y nunca lo será. Es aberrante como familias, amistades, relaciones se rompen por la poca tolerancia y la necesidad de querer imponer algo.
Todos podemos caer en el fanatismo
Por otra parte nadie está exento del fanatismo pues a todos nos gusta profundamente algo, es algo de la vida misma, peor sólo hay que tener equilibrio de decir hasta aquí.
Nada puede ser más valioso que el calor de tu hogar con los tuyos, el compartir con tus amigos y tu pareja.